El 2 de julio de 2010 el mundo vio quizá el partido más completo de la historia de la Copa del Mundo, con 120’ y penales infartantes. Hubo de todo, desde la excepción a la regla hasta imágenes que despertaron sana envidia del resto del mundo.
"La derrota tiene algo positivo, nunca es definitiva.
En cambio la victoria tiene algo negativo, jamás es definitiva".
José Saramago.
El 2 de julio de 2010 en el estadio de Johannesburgo el mundo vio a Uruguay en una cancha de fútbol y lo recordará por mucho tiempo. No sólo futboleros, sino del resto. Quizá varios se dieron cuenta que existía un país y todo, cuando vieron el partido. Cuando se le puso una mano enfrente y se la “picó” en la cara de la regla del mismo juego.
Porque el partido tuvo de todo. Y también la realidad de un equipo compacto, que fue in crescendo en la competencia y sabía lo que tenía a mano, y le dio fiel uso, sin especulaciones. Con un Diego Forlán en su mejor momento, y a la postre Mejor Jugador FIFA del certamen, con Luis Suárez metiéndola en momentos claves (México, Corea del Sur), un Edinson Cavani sacrificado de puntero, un mediocampo de contención Pérez-Arévalo, y una defensa de gran labor, con destaque de Lugano-Godín-Victorino-Fucile, los carrileros Pereira (Maximiliano y Álvaro) se unieron a un Fernando Muslera para dar forma a la “Celeste”.
El partido comenzó con los uruguayos siendo más que los ghaneses. Se veía en la cancha. Como también la jugada casi crítica donde el lateral Jorge Fucile cayó mal luego de disputar un balón con el player Vorsah. Los goles fueron a los 46’ de Sulley Muntari, tras remate de larga distancia que se abrió más de la cuenta a Muslera. La picante Jabulani no quiso ser menos protagonista y a los 55’ le jugó en contra al arquero ghanés, Kingson. El partido pudo haberse definido para cualquiera hacia el final de los 90’ reglamentarios. Hubo prórroga, hubo multitudes pendientes en calles de América y de África.
Uno de los partidos más destacados de la historia de la Copa del Mundo por su relación de calidad-cantidad tanto para los jugadores, hinchas y espectador objetivo del deporte: los “celestes” jugaron nuevamente de visitantes completamente ante 85.000 personas, era la primera vez que podía darse que un equipo africano (Ghana) accediera a estar entre los mejores cuatro del mundo, y con el detalle nada menor de poder hacerlo dentro del primer Mundial celebrado en África. Además duró lo máximo que un partido puede durar (120’), y sobre el último minuto posible hubo una mano en la línea del arco, expulsión y pena máxima, penal errado por Gyan y los inmediatos penales para definir. Más allá de la buena ejecución de penales de los shoteadores celestes (Forlán, Victorino, Scotti, Pereira y Abreu) y la gran labor del arquero Muslera, en la serie final la “picada” del ingresado Washington Abreu fue la frutilla de la torta para un partido inolvidable para este deporte.
Finalmente Uruguay no ganó la Copa del Mundo; el gusto se lo dio por vez primera España, el mejor del torneo. Pero se supo cumplir. Se hizo historia de la buena, de la que todos vimos. Y lo mejor de todo es que lo podremos recordar con nuestras calles de ayer, hoy y mañana.
Mathías Dávalos
Dos de los Washington más reconocidos de nuestro fobal
5 comentarios:
El partido, la excepción a la regla.
Gracias querido .g por la foto.
Saludos para todos.
Que lindo mundial vivimos. Muy feliz comienzo del 2011 a todos los que nos leen a diario, gracias por estar ahi.
Casi me hace largar el moco el poeta Centrojá.
Que año de todos, del Ruso y Washington. Extraño mi país!!!!!
a usted gracias, querido centrojá, saludos al tercer washington, al asador y los amigos, y las tías.
arriba, carbonero97.
que terminen bien y arranquen mejor.
salú
Que foul inventado en la hora para Ghana!! Nunca pasaron el replay, pero Fucile está a 10 metros de distancia del grone que se cae... Un ladrón el juez. Ah, y en la jugada de "la mano de Suarez" en realidad fue offside de dos ghaneses.
Abrazo, felíz año!
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